“- Los humanos tienen sueños. Hasta los perros tienen sueños, pero no tú. Tú eres solo una máquina. Una imitación de la vida. ¿Puede un robot escribir una sinfonía? ¿Puede un robot convertir… un lienzo en una obra maestra?

• ¿Podría usted?”

De la película «Yo Robot»

Los bebés “a la carta” y la “selección artificial” estarán a la orden del día y provocarán que las futuras generaciones sean más inteligentes, resulten más atractivas y posean un físico mejor.

Eso es lo que defiende el transhumanismo, un movimiento cultural e intelectual internacional, que tiene como objetivo transformar la condición humana mediante el el desarrollo y fabricación de tecnología ampliamente disponibles, que mejoren las capacidades humanas, tanto a nivel físico, como psicológico o intelectual.

Los pensadores transhumanistas, estudian los posibles beneficios y peligros de las nuevas tecnologías que podrían superar las limitaciones humanas fundamentales. Como también la tecnoética, la parte ética de desarrollar y usar esas tecnologías.

Estos especulan sosteniendo que los seres humanos pueden llegar a ser capaces de transformarse en seres con extensas capacidades, merecedores de la etiqueta “posthumano”.

Todo muy bien, sin embargo, a mí solo me viene a la cabeza una pregunta, ¿se encamina el ser humano a una irremediable deshumanización?

Desde tiempos remotos el hombre ha buscado el elixir de la eterna juventud, la inmortalidad, alquimistas, magos  y brujos, no han escatimado en esfuerzos ni medios para alcanzar la vida eterna, entiendo que sin éxito.

Los científicos

Hoy, esos alquimistas evolucionados a los que llamamos científicos., creen por fin haber encontrado su piedra filosofal, la tecnología. Sin embargo, todos sabemos que toda evolución hacía una especie superior, conlleva irremediablemente a la desaparición de la especie inferior.

La evolución “asistida”, no nos engañemos, estará solamente al alcance de unos pocos, de aquellos que se la puedan permitir, y hablamos de dinero, los poderosos están destinados a ser la raza superior ¿Y el resto?  El resto desaparecerá, esa es la mejor opción, la otra sería simplemente la esclavitud.

Aspiramos a vivir eternamente. Nos cuesta entender la esencia de la existencia. Nos aferramos a esta vida, a este envoltorio, que nos ha sido prestado, como si esto fuera todo cuanto hay.

Seguimos sin entender que la persona tan solo es una etapa de nuestro ser, un ser inmortal, eterno, un ser cuya capacidad no se puede transformar con ninguna máquina. Pero el humano del futuro esta llegando con el transhumanismo.

“- Pensé que estabas muerto.

• Técnicamente nunca estuve vivo, pero aprecio su preocupación.”

Yo Robot