
Hamburguesas de Espinacas.
7 de octubre de 2025
Hubert Van Hennis «El Guillermo Tell Belga»
7 de octubre de 2025«El hombre es lo que come», Lucrecio (99 a.C. – 55 a.C.)
Agradecimientos a Don Juan Serrano Gandia. Vicepreseidente de Sesmi.
¡Bienvenidos a un nuevo post de Que la salud te acompañe! Soy Antonio Galdeano, farmacéutico y divulgador (@FarmaciaGaldeano en TikTok e Instagram), y hoy quiero hablaros de un tema fundamental: la nutrición. Como ya decía Lucrecio hace más de 2000 años, lo que comemos define nuestra salud. En este artículo, exploraremos cómo la alimentación impacta nuestra vida, los retos de la industria alimentaria actual y cómo podemos tomar mejores decisiones para nutrirnos bien. Además, compartiré un resumen de mi entrevista con Juan Serrano Gandía, experto en medicina integrativa, ¡un referente en este campo!
La alimentación: la base de una vida saludable
En la antigüedad, sin medicamentos avanzados, comer bien era clave para una vida larga y sin enfermedades. Quienes tenían acceso a alimentos de calidad vivían más y mejor. Sin embargo, hoy parece que hemos olvidado esta sabiduría. Confiamos demasiado en los fármacos para compensar elecciones alimentarias poco acertadas, y la industria alimentaria, con sus mensajes contradictorios, no siempre nos lo pone fácil.
Vivimos en una época de abundancia, pero también de confusión. ¿Qué es saludable? ¿Qué dieta debemos seguir? La información cambiante y los lobbies alimentarios dificultan distinguir lo bueno de lo malo. Además, la legislación no siempre protege la calidad. Por ejemplo, hasta hace poco, en España se podía etiquetar como «miel española» un producto con solo un 1% de miel local, perjudicando a nuestros apicultores, que son de los mejores del mundo.
Alimentos de calidad: un reto actual
En España, con suelos fértiles donde «cae una semilla y crece un árbol», producimos alimentos de gran calidad. Sin embargo, consumimos productos importados de terceros países que podrían cultivarse aquí, con mejor calidad y menor impacto ambiental. Mi recomendación: prioriza alimentos de proximidad y estacionales. No solo son más sostenibles, sino que nuestro cuerpo está evolutivamente adaptado a ellos. Nuestras enzimas digestivas procesan mejor los alimentos de nuestra región, y comer un mango en diciembre, aunque posible, no es lo ideal.
A menudo, en mi farmacia en la sierra de Madrid, veo pacientes con molestias digestivas sin causa aparente. Al analizar su dieta, descubrimos que consumen alimentos poco comunes o de baja calidad. Volver a una dieta mediterránea tradicional —la de nuestros abuelos, con buen aceite de oliva, legumbres y frutas locales— suele resolver estos problemas. Lamentablemente, muchos alimentos actuales, como el pan o los tomates, no tienen la calidad de antaño.
Equilibrio: la clave de una buena nutrición
Para mantener la homeostasis (el equilibrio de nuestro cuerpo), necesitamos una dieta balanceada. No se trata de abusar de algo «sano», como el aceite de oliva, que en exceso puede ser perjudicial por ser una grasa. Lo mismo ocurre con los carbohidratos, grasas y proteínas: todo tiene un límite. La dieta debe adaptarse a nuestras necesidades según la edad, actividad física o condiciones de salud.
Errores comunes que debemos evitar
- Conservas y ultraprocesados: Las latas de atún o sardinas no son malas, pero en exceso pueden aportar plásticos, conservantes o metales pesados. Además, los omega-3 de estas conservas suelen oxidarse, perdiendo valor nutricional.
- Calorías «extras»: El pan, el picoteo o bebidas como la cerveza (rica en carbohidratos y alcohol) a menudo no se contabilizan, desequilibrando la dieta, especialmente en personas con obesidad o problemas metabólicos.
- Carbohidratos y ansiedad: Los carbohidratos, como los azúcares o el pan, generan dopamina y pueden crear dependencia, llevándonos a consumirlos en exceso en momentos de ansiedad. Si no los quemamos, se convierten en grasa.
La importancia de la calidad
- Grasas: Las grasas animales son más digeribles para nosotros evolutivamente, pero la calidad es clave. Un omega-3 de mala calidad, oxidado o con metales pesados, puede causar inflamación. Mejor comer un buen pescado fresco que un suplemento dudoso.
- Proteínas: Las proteínas animales suelen tener mayor valor nutricional, aunque las vegetales son una opción válida. Sin embargo, la calidad sufre en criaderos intensivos. Evita embutidos con conservantes y prioriza productos como el jamón curado de calidad.
- Hospitales y alimentación: Es sorprendente que en algunos hospitales se sirvan ultraprocesados, como galletas, a pacientes. En un entorno donde la nutrición debería ser impecable, esto es un error que debemos corregir.
La prevención como pilar de la salud
La nutrición no solo trata enfermedades, sino que las previene. En mi farmacia, siempre digo que la salud comienza con dos pilares: el descanso y la alimentación. Comer bien empieza con una buena compra: elige alimentos de calidad, aprende a combinarlos y consúmelos en proporciones adecuadas. Enseña a tus hijos a cocinar y a elegir bien los alimentos; es el mejor legado para una vida saludable, junto con la actividad física.
En España contamos con excelentes nutricionistas y farmacéuticos especializados que pueden guiarte. Si necesitas orientación, no dudes en acudir a ellos.
Entrevista con Juan Serrano Gandía: Medicina integrativa
En el último episodio de Que la salud te acompañe, tuve el placer de entrevistar a Juan Serrano Gandía, biólogo, divulgador y vicepresidente de SESMI. Juan es un pionero en la medicina integrativa, un enfoque que combina la medicina convencional con prácticas complementarias basadas en la evidencia científica.
¿Qué es la medicina integrativa?
Juan explicó que este modelo, surgido en los años 90 en EE. UU., se basa en dos pilares:
- Complementariedad: Integra prácticas no convencionales (como la acupuntura) con la medicina científica, siempre con criterios de seguridad y eficacia. No sustituye una cirugía necesaria, pero puede complementar tratamientos.
- Visión holística: Considera al ser humano en su totalidad (física, psicológica, emocional, social), centrándose en la salud más que en la enfermedad.
A pesar de los retos, como la resistencia inicial de algunos profesionales sanitarios, Juan destaca que la medicina integrativa busca ser una aliada, no una enemiga, de la medicina convencional. Su enfoque nos recuerda que la salud es un todo, y la nutrición es una pieza clave.
Conclusión: Come bien, vive mejor
Como decía Lucrecio, somos lo que comemos. Elegir alimentos de calidad, de proximidad y estacionales, y mantener una dieta equilibrada son pasos esenciales para una vida saludable. Evita los ultraprocesados, controla las calorías «extras» y confía en profesionales como nutricionistas y farmacéuticos para orientarte. ¡Tu salud empieza en la despensa!
Si te ha gustado este artículo, sígueme en @FarmaciaGaldeano en TikTok e Instagram, y no te pierdas los próximos episodios de Que la salud te acompañe. ¿Qué opinas sobre la nutrición actual? ¡Déjame tu comentario!